Sí, parece que estamos más conectados que nunca… pero muchos de nosotros seguimos sintiéndonos solos y, dentro del colectivo LGTBI+, esa soledad no deseada tiene matices que casi nadie nombra
La soledad no deseada no es “estar solo”
Implica no sentirse visto, no sentirse validado, no sentirse comprendido ni aceptado… incluso cuando tienes compañía a tu alrededor y gente que te quiere.
Para la mayoría de las personas LGTBI+, la sensación de soledad empezó mucho antes de salir del armario, porque vivimos muchos años escondiendo quiénes éramos y hacia quiénes nos sentíamos atraídos, creando un vacío emocional en una parte de nosotros mismos por no ser vistos de verdad.
Así, la suma del miedo al rechazo, la sensación de sentirse invisible cuando sólo eres un adolescente, la falta de referentes o espacios seguros, y una hiperindependencia emocional como mecanismo de defensa… nos llevaron a vivir una experiencia subjetiva de soledad, más…
+ tristeza + miedo + frustración
+ ansiedad + culpa + vergüenza
Que puede llevar a un aislamiento disfrazado de autosuficiencia y autoexigencia… (Sí, y autosabotaje)
Cuesta digerirlo todo, así que léelo de nuevo porque puede que resuene bastante contigo…
Y, cuando por fin puedo mostrarme tal como soy y comienzo a tener vivencias en las que me vinculo a alguien con menos miedo, intentando superar mis dificultades para confiar o para mostrarme vulnerable tras años de ocultamiento, me encuentro (de nuevo) con esa sensación de soledad, ahora por parte del propio colectivo.
Quiero una vida compartida, quizás formar mi propia familia, y tener una bonita historia que contar, sentir que pertenezco a un sitio… pero, al mismo tiempo, me encuentro con personas fugaces, que quieren estar bien sólo por un rato, y luego ignorarme y desaparecer…
Y es que la presión estética dentro del colectivo, el clasismo, la sensación de no encajar en ningún grupo, el scroll infinito, o bien las luces de néon y las fiestas borrosas… pueden llevarme fácilmente (de nuevo) a sentir soledad, a sentir exclusión, a sentir un vacío que parece que nadie ocupa.
Mostrarme vulnerable, expresar ese sentimiento de soledad y reconocer todos aquellos mecanismos que empleo para protegerme del vacío emocional, es un paso de gigante para volver a conectar conmigo de una manera plena, para reconstruir vínculos seguros y reaprender a habitar en mí con menos miedo.
Si esto conecta contigo y te remueve, si te sientes identificado con estas señales, o bien no sabes cómo volver a retomar la relación contigo, permítete apostar por ti y escríbeme.
¡ESTOY CERQUITA!
¡Gracias por llegar hasta aquí!
Si te gusta lo que lees, si sientes que te representa, si te apetece, puedes suscribirte a mi Boletín de Noticias y puedes escribirme para lo que quieras, estoy encantadísimo de leer tus reflexiones y todo lo que surja por tu cabeza.
¿Eres una persona profesional y quieres aprender más acerca de la Psicología Afirmativa LGTBI? Puedes acceder a FORMACIÓN o contacta conmigo y te informaré sobre las próximas convocatorias de cursos.
¿Necesitas acompañamiento psicológico especializado en Psicología Afirmativa? Contacta conmigo y hablamos.
